domingo, 15 de agosto de 2021

Perlas

 


Un dato interesante acerca de la incertidumbre es que, ese suspenso interminable que nos transporta hasta el umbral de la gigantesca puerta de la desesperación, es el mismo que origina nuestra persona al desconfiar de alguien. La confianza es igual de frágil que esas vajillas que guardan nuestras abuelas, cuando somos muy jóvenes para entender que son muy destructivas nuestras manos de infante con ilusión de conocer todo aquello que nos rodea. De todas maneras, no es la idea usar metáforas innecesarias para explicar esto porque todos confiamos, todos fuimos defraudados, algunos quisimos ser defraudados por ese incesante ultimo aliento de fe ciega en el cambio. Pero, lo que es seguro, es que esa manera asoladora de perder la fe en las personas no es la solución; dando paso a ese torbellino de inseguridad en nuestra vida, cada minuto que transcurre en el reloj es un metro más cavado de nuestro propio pozo hacia un sinfín de malas decisiones, cuando cada individuo es simplemente eso, individual, único, plenamente singular en un mar de perlas que deslumbran nuestra vista. El secreto es saber cual brilla con nuestra compañía y cual brilla con distintos reflectores a su alrededor.                                                                 

Share: